En el blog de hoy, hablaremos sobre los dos tipos de toldos más comunes que nos encontramos para cubrir una zona completa. Ya sea de pared a pared o con estructura/pérgola, es un tipo de solución que nos protege del sol o lluvia, además de darnos privacidad. Por tanto, a la hora de elegir toldo con aluminio o con alambre, debemos tener en cuenta las siguientes ventajas y desventajas que nos proporcionan.
Toldo de alambre
En este tipo de cubierta, nos encontramos ante un toldo que contiene filas de piquetes (argollas circulares/semicirculares) que circula a través de alambres. Se trata del mecanismo de toldo más clásico y que más viste en una arquitectura tradicional, como pueden ser los patios interiores.
Ventajas: cuando nos referimos a este tipo de vela, estamos hablando de un toldo que tiene un precio más económico debido a los materiales. El alambre y los piquetes, al ser de acero y no de aluminio resultan más asequibles para el cliente.
Desventajas: La circulación a través de los alambres con el tiempo hace que cueste un poco más, aún así , no es nada insoportable.
Toldo de aluminio
Cuando hablamos de un toldo de aluminio o palillería, nos referimos a una vela con perfiles de aluminio. Estos perfiles marcan las calles y contienen poleas por donde circulan a través de dos guías también de aluminio. Este tipo de toldo, tiene un precio más elevado, pero también es cierto que su fortaleza y comodidad es mayor al anteriormente mencionado.
Ventajas: como se ha mencionado en el párrafo anterior, este tipo de toldo circula mucho más fluido debido a las poleas que colocan en los perfiles. Además estas poleas por lo general, son de rodamiento lo que facilita aún más su movimiento.
Desventajas: Precio en comparación con el toldo de alambre, más aún en estos momentos que el aluminio está en alza en el mercado.